En el otro bando el Mallorca de Caparrós no levanta cabeza. El de utrera optó por reservar a los titulares para la liga, y la verdad, no le salió nada bien. Aunque es cierto que la competición doméstica es prioritaria para los bermellones, una goleada de este tipo no es digerible cuando en liga llevas tres meses sin ganar.
El Mallorca estuvo flojito, pero es cierto que el Sevilla estuvo con hambre. Tuvo el control de la primera mitad con buenos contraataques, movilidad en el centro del campo, y un trío en la medular que hace pensar que al menos hay un buen sustituto para Maduro. El francés Kondogbia va ganando enteros. Ya no rifa tanto la pelota, y aunque sigue cometiendo algunos fallos de precipitación, el futbolista galo va tomando cuerpo.
Si en el centro del campo se ven detalles para el futuro, la portería sigue siendo para el veterano. Palop, que en su regreso a la titularidad cuajó un buen encuentro. Le detuvo un penalti a Gio al final de la primera parte, que sin duda hubiera metido a los mallorquines en el encuentro.
Con este 0-5, la escuadra nervionense deja la eliminatoria cerrada y ya espera rival en cuartos. Sin duda en la última década, la trayectoria del Sevilla en la Copa es reseñable. Desde la temporada 2003/ 2004 hasta la fecha, los hispalenses han alcanzado las semifinales en cinco ocasiones saliendo campeones en dos. Veremos si este camino es repetible este año.
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